Cuidados y precauciones ante el sol
Desde que los primeros rayos de sol empiezan a calentar, nos llegan mensajes por tierra, mar y aire que explican la importancia de utilizar protección solar para evitar daños irreparables en la piel. También debemos proteger nuestra piel despues de haber estado expuestos al sol, con un buen After Sun. De hecho, los dermatólogos insisten en que deberíamos utilizar cremas fotoprotectoras durante todo el año, y no solo unos minutos antes de tostarnos vuelta y vuelta al sol en la playa/piscina… Si el día amanece nublado, no te confíes, ¡los rayos ultravioletas lo atraviesan todo!
La acción previa la tenemos clara pero, ¿qué cuidados necesita nuestra piel después de la exposición al sol? No hay ninguna duda: hidratar y calmar. Y para eso el After Sun no tiene rival. A diferencia de las cremas hidratantes y nutritivas, el After Sun también incluye una acción calmante (por su elevado contenido en agua); ayuda a regenerar la piel y tiene efecto refrescante, aliviando los síntomas en las pieles un poco quemadas.
Prolonga el bronceado con after sun
Como la piel tiene memoria, el After Sun también la prepara para nuevas exposiciones al sol, volviéndola más resistente. Algunos, incluso, ayudan a prolongar el bronceado o contienen principios activos que actúan como anticelulíticos, reafirmantes o anti-edad.
En el mercado podemos encontrar After Sun en todo tipo de formatos, para elegir el que mejor se adapta a nuestras necesidades y gustos: loción, gel, bruma, sérum, mousse…
A la hora de aplicarlo, es importante saber qué capas de nuestra piel ha podido dañar el sol, ya que los daños pueden ser desde un leve enrojecimiento de la zona, hasta la aparición de dolor y presencia de ampollas (en este caso deberíamos acudir a un médico).
El After Sun de Atlantia es una leche calmante que contiene Aloe vera canario puro 100% ECO. Ayuda a aliviar el ardor y enrojecimiento de la piel producidos por el sol, calma la piel y aporta suavidad, acelerando el proceso de regeneración de la piel.
Su modo de empleo consiste en masajear levemente las zonas dañadas hasta su completa absorción, varias veces al día y hasta que remita el daño causado. En cualquier caso, la mejor protección que podemos tener es evitar la exposición prolongada a los rayos ultravioleta.
Si quieres multiplicar la sensación de frescor que proporciona el After Sun de Atlantia, guárdalo siempre en la nevera, después de cada uso.
Pégate una buena ducha cada vez que vuelvas de tomar el sol, asegurándote de que eliminas cualquier resto de crema solar, sal, cloro, etc.. Acto seguido, aplica el producto por todo el cuerpo sin escatimar…Sin duda ¡tu piel te lo agradecerá!